Si no mal cuento, deben ser unas seis fechas las que debieron postergarse este año por las adversas condiciones climatológicas de los fines de semana y además por los estados en que quedaban los campos de juego de los diferentes estadios.
Un hecho nunca visto en años, tantas suspensiones por la cantidad de lluvia inusual de éste invierno.
Para no ser menos, éste sábado y domingo el pronóstico tampoco fue alentador y toda la 14ª fecha pasó para el próximo finde.
Una pena porque el Torneo se dilata, los equipos pierden ritmo, se enfría el entusiasmo del público, cuerpos técnicos y jugadores. No es lo mismo entrenar durante la semana que después dejar todo en la cancha. Algunos equipos lo sienten más que otros. Por ejemplo a San Vicente muy mal no le ha ido, aunque por supuesto que todos los fines de semana quieren tener los botines calzados, pero por lo menos el equipo sigue ganando fecha tras fecha y está consolidado como el gran candidato al título.
Al "Defe" de Valeria, que era perseguidor en la tabla de posiciones del "Sanvi", sin embargo estas intermitencias le cayó muy mal, aún recuperando a jugadores que venían de lesiones, el plantel de Miguel Barrios ha dejado muchos puntos en el camino en las últimas fechas.
San Lorenzo de Villa Gesell esta ahí, a 7 puntos del líder pero tampoco se siente cómodo jugando salteado.
El resto está lejos, pero bueno muchachos es lo que hay, a mal clima buena cara, contra la naturaleza no se puede y con las canchas de nuestra Liga tampoco, los presupuestos de mantenimiento son bajos, los costos para mantener un campo de juego como corresponde son muy altos y entonces hay que conformarse con lo que hay. Tal vez el año que viene tengamos un invierno menos lluvioso y el campeonato se lleve adelante sin contratiempos.
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